ES UNA REALIDAD, ¡HAY LUCHA DE
CLASES!
No nos podemos engañar. Existe una
violenta actuación “enmascarada” de sojuzgamiento de la “clase trabajadora” a
la que se le “demoniza”, mediante desvalorización, desprestigio, desarraigo,
descontextualización,… y una vez alienada, manejarla con mayor comodidad.
El empresario, tanto
como el trabajador por cuenta ajena, no son malos. Es la naturaleza ruin
de cada cual, la que al subvertir el orden, anteponiendo el enriquecimiento
desmedido y desproporcionado, destroza el equilibrio social, el pacto social
necesario para el progreso.
Aquellos pueblos a los que
mezquinamente destrozan este “Pacto Social”, aniquilan su futuro.
El valor transformador y
conservador del medio, mediante el trabajo en la naturaleza es constructivo y
es co-creador… cuando se anteponen intereses torcidos, es depredación.
Es un hecho que nuestro mundo, nuestra realidad, se va convirtiendo en una realidad virtual,
mágica, mitológica, esotérica… Antes atacábamos “bastillas”, “palacios de invierno”… hoy
nos situamos en medio de un laberinto de espejos, donde las imágenes reflejadas
son ficciones, apariencias… Así que todo cambio que no pase por el hombre y la
naturaleza, está condenado a su desmoronamiento y desaparición. La verdadera
construcción está dentro de nosotros, es el ser humano el que se tiene que autotransformarse…
lo demás es engaño y pérdida de tiempo. Y esto es cosa de cada uno. La lucha
no se supera con más luchas. El gregarismo, las masas, es un nivel animal
de actuación, así las manadas, las jaurías, los enjambres… si somos diferentes, actuemos de modo inteligente.
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